Dejar en el olvido las reiteradas imágenes de niños obstruidos y víctimas del asma, a consecuencia de la contaminación atmosférica, es uno de los principales objetivos por los que está trabajando el Ministerio del Medio Ambiente, según anunció el subsecretario de la cartera, Marcelo Mena, quién destacó los resultados de la estrategia de calidad del aire que está desarrollando el gobierno.
La autoridad expuso sobre los avances que ha conseguido el gobierno en esta materia, en el X Congreso Chileno de Neumología Pediátrica, donde no sólo introdujo a los médicos en las principales consecuencias de la contaminación ambiental, sino que además dio cuenta sobre cómo está avanzando el país en esta materia, gracias a la puesta en marcha de las alertas sanitarias.
Marcelo Mena destacó de esta herramienta, las prohibiciones que se impusieron logrando reducir drásticamente las emisiones de material particulado MP2.5, pudiendo disminuir las consultas en algunos casos, por patologías respiratorias. “A través de este plan se pudo abordar de manera integral los problemas de contaminación, en zonas que aún no cuentan con un plan y permitieron analizar el comportamiento de las enfermedades respiratorias durante su aplicación, por altas concentraciones de material particulado MP 2.5 en 14 comunas de Chile”, destacó la autoridad.
Respecto a los resultados de la alerta, relevó que se constataron reducciones de hasta 30% de episodios críticos y además en algunos casos hubo una disminución de indicadores de enfermedades respiratorias. Un ejemplo de ello es Curicó, donde según cifras del Ministerio de Salud, las consultas por enfermedades respiratorias se redujeron hasta en un 16%.
Contaminantes emergentes
Por otro lado, indicó la autoridad ambiental es cada vez es más importante que haya un vínculo entre medio ambiente y salud. Hoy la principal preocupación de la población es salud, sin embargo en invierno el binomio medio ambiente y salud es fundamental para lograr ese objetivo. “Nosotros estamos preocupados de abordar contaminantes emergentes que no están regulados y que es necesario que la comunidad de médicos broncopulmonar tengan en cuenta”, señala.
El subsecretario del Medio Ambiente destacó que los principales desafíos están en mejorar la capacidad de predicción en MP2.5 para las preemergencias y emergencias bajo alerta sanitaria, junto con el empoderamiento de la ciudadanía para el autocuidado. Para ello ya se encuentran trabajando junto al Ministerio de Salud.
Por último insistió en que necesitamos generar y mantener indicadores de salud que sirvan para evaluar los avances, lo que aunado a la implementación de Planes de Descontaminación al más breve plazo y junto con la aplicación de medidas estructurales, permitan el cumplimiento permanente de las normas. “Por lo tanto, el estado de salud de nuestros niños y de nuestra población, debiera ser nuestro principal indicador de descontaminación”.