Una importante labor para fortalecer la aplicación de este acuerdo está realizando el Ministerio del Medio Ambiente, a través de talleres de difusión a lo largo del país.
El Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe (Acuerdo de Escazú) se adoptó el 4 de marzo de 2018 en Escazú, Costa Rica, con el apoyo de la CEPAL en su calidad de Secretaría y la participación del público. El Acuerdo entró en vigencia el 22 de abril de 2021.
Este acuerdo es el primer tratado que los países de América Latina y el Caribe han celebrado en materia ambiental, el único en el mundo que contiene disposiciones específicas destinadas a proteger a los defensores de los derechos humanos en asuntos ambientales.
Para socializar este acuerdo, la SEREMI del Medio Ambiente ha organizado dos jornadas denominadas “Consulta Pública del Anteproyecto del Plan de Implementación Participativa del Acuerdo de Escazú en Chile 2024 – 2030 (PIPE).” En la región de Coquimbo se realizaron en Illapel y La Serena, donde se recogieron opiniones y observaciones de la ciudadanía sobre la puesta en marcha de este acuerdo latinoamericano.
Silvia González integrante de la Fundación Regenial quien participó en el penúltimo taller realizado en La Serena destacó que “esta instancia de participación ciudadana es bien importante para conocer este acuerdo, comunicarlo y difundirlo. Necesitamos educarnos en estas instancias ambientales para participar como
sociedad.” Por su parte, Claudia Aravena de la Compañía Minera del Pacífico (CMP) indicó que “el taller me pareció muy interesante, conocimos los pilares fundamentales que posee para abrir la educación ambiental a la comunidad. Quiero destacar el acceso a la información ambiental, que es robusto y que capacite a las personas, que exista sinergia entre las consultas, respuestas, la autoridad y la academia.”
Con respecto al taller realizado en Illapel, el Seremi del Medio Ambiente Leonardo Gros manifestó “hemos desarrollado un taller con pertinencia cultural donde se enfatizó la participación de representantes de pueblos originarios de la provincia del Choapa y se analizó el proceso ciudadano del acuerdo, el cual está abierto a recibir consultas y observaciones hasta el primero de febrero. Instamos a la comunidad a compartir sus observaciones.”
Objetivos del Acuerdo
El propósito principal de este documento “es garantizar la implementación plena y efectiva de los derechos de acceso a la información ambiental, la participación pública en los procesos de toma de decisiones ambientales y el acceso a la justicia en asuntos ambientales, así como la creación y el fortalecimiento de las capacidades y la cooperación, para contribuir a la protección del derecho de cada persona, de las generaciones presentes y futuras, a vivir en un medio ambiente sano y al desarrollo sostenible.”
El Acuerdo de Escazú se rige por el derecho internacional, por lo que establece obligaciones jurídicamente vinculantes para los Estados participantes. Actualmente está abierto a los 33 países de América Latina y el Caribe, en espera de “la ratificación, aceptación o aprobación de los Estados que lo han firmado”.
Organización del acuerdo
El documento está estructurado en las siguientes 6 grandes secciones:
Parte General: Preámbulo, Objetivo, Definiciones, Principios y Disposiciones generales
Parte sustantiva: Acceso a la información ambiental, Participación pública en los procesos de toma de decisiones ambientales, Acceso a la justicia en asuntos ambientales, Defensores de los derechos humanos en asuntos ambientales y Fortalecimiento de capacidades y cooperación.
El Acuerdo de Escazú está fundado en varias fuerzas motrices, las que se reflejan en mayor o menor medida en el texto del documento. Algunas de las principales fuerzas motrices que sustentan el acuerdo son: “Diferentes formas de abordar problemas comunes”; “Aunque el grado de implementación difiere entre los países, todos tienen algo que ganar y algo que ofrecer”; “Enfoque no punitivo”; “No se establece un nivel máximo, sino un nivel mínimo que refleja la complementariedad con otros compromisos”; “Espíritu de colaboración” y “No dejar a nadie atrás”.