Primero se había comprometido la presidenta Michelle Bachelet en su primer discurso presidencial del 21 de mayo pasado. Luego el ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier, empeñó su palabra ante un grupo de diputados de la llamada “bancada glaciar” de que el gobierno impulsaría una ley de protección de los glaciares.
Seis meses después, el propio Badenier firmó un acuerdo con senadores y diputados del oficialismo y la oposición para que respalden una indicación sustitutiva que, en lo grueso, permite la protección del 100% de la superficie glaciar del país.
El gobierno ingresó la indicación ante la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara, tras intensas negociaciones con parlamentarios del oficialismo y la oposición, así como gremios y organizaciones civiles, además de las empresas mineras. De hecho, los responsables de los proyectos de Pascua Lama, Pelambres y Codelco Andina plantearon sus inquietudes por tratarse de proyectos ya aprobados, los que de todas maneras se verán afectos a la ley.
“Está asegurada la protección del 100% de los glaciares del territorio nacional, incluso a través de la revisión de resoluciones de calificación ambiental ya otorgadas”, dijo el ministro a la página web de la Cámara de Diputados. Entre otras medidas se declararán los glaciares como bienes de uso público y no se podrán constituir derechos de aprovechamiento de agua sobre los mismos.