En la ciudad de Cauquenes en la región del Maule, se llevó a cabo el “Taller de Capacitación en Experiencias en Reconversión Tecnológica del Sector Ladrillero”, patrocinado por el Ministerio del Medio Ambiente (MMA), la Coalición de Clima y Aire Limpio para la reducción de contaminantes de vida corta (CCAC) del Programa de las Naciones Unidas (ONU) para el Medio Ambiente y la fundación independiente Swisscontact, orientada al fomento económico para la cooperación internacional para el desarrollo.
El encuentro, tuvo como objetivo dar a conocer distintas experiencias para la producción limpia de ladrillos, por medio de representantes de Argentina, Perú y Colombia, a los productores de la provincia de Cauquenes.
Junto con ello, se entregó el “Manual de Capacitación Sector Ladrillero en América Latina” elaborado por la Coalición de Clima y Aire Limpio y que exhibe modelos de hornos amigables; estrategias para potenciar una industria ladrillera con la aplicación de tecnologías eficientes para la cocción; las que al implementarse generan transformación en la producción de ladrillos.
Según manifestó la Seremi del Medio Ambiente de la Región del Maule, María Eliana Vega, “el taller se realizó por dos días en Cauquenes, porque existe un gran número de ladrilleros artesanales en esta zona. Es importante capacitarlos, entregarles conocimiento y mostrarles la realidad de otros países latinoamericanos y estas experiencias de trabajo pueden ser replicadas y mejorar la producción del sector ladrillero y por otra parte, bajar los niveles de contaminación porque durante la cocción o quema de ladrillos y tejas se genera material particulado, dañino para la salud de la población y el medio ambiente”.
Añadiendo que “estuvimos visitando diversas ladrilleras artesanales de Cauquenes, junto a las delegaciones internacionales, para constatar el proceso de producción y las condiciones medioambientales y buscaremos la forma de obtener recursos para desarrollar un programa piloto enfocado al diseño o adaptación de hornos amigables con el entorno”.
En tanto, el representante de la fundación Swisscontact en Perú, Jon Bickel, quien trabaja con la Coalición de Clima y Aire Limpio para la reducción de contaminantes de vida corta (CCAC) sostuvo que “la realidad de Chile es que todos producen de una forma muy artesana y la experiencia que hemos pasado en Latinoamérica indica que hay que ir paso a paso para mejorar la producción de ladrilleros, desde la arcilla, mejores mezclas y como introducir pequeñas tecnologías para que puedan mejorar su producto, sus ingresos, llegar a tener hornos eficientes y es posible realizar los cambios para reducir la emisión de contaminantes climáticos de vida corta”.
Productores de ladrillos
Por su parte, el productor artesanal José Moraga, quien lleva practicando este oficio por más de 30 años, indicó que “esta es nuestra única fuente de trabajo y hay formas de mejorar la producción, pero necesitamos apoyo para incorporar tecnologías en el sector ladrillero”.
Durante la visita al productor de ladrillos y maestro tejero, Joselito Urra, señaló que “nosotros estamos claro que la contaminación genera daños, pero este es nuestro trabajo y si nos dieran facilidades para modificar la producción de ladrillos artesanal, esto sería muy bueno”, concluyó.
Contaminantes climáticos de vida corta
Es importante resaltar que con este tipo de iniciativas de educación ambiental, se espera concientizar a los productores de ladrillos, sobre la importancia de reducir la emisión de contaminantes climáticos de vida corta (SLCPs), que son compuestos cuyo tiempo de vida en la atmósfera es menor que el de los gases de efecto invernadero, como es el carbón negro, generado por la combustión incompleta de combustibles de biomasa como leña, aserrín, lampazo, en los hornos abiertos de las ladrilleras artesanales.
Disminuir estos contaminantes climáticos de vida corta, no sólo causa un beneficio en la salud de las personas, también favorece, la mitigación del calentamiento global, debido que las partículas oscuras de estos contaminantes, absorben la luz y emiten calor, incrementando la temperatura de la atmósfera, lo que provoca el derretimiento de los glaciares y perdida de los mantos de hielo que son reservas de agua dulce, vitales para nuestro país.