La Escuela G-23 Pukará de Lasana, ubicada en la localidad del mismo nombre distante a 37 kilómetros al noreste de Calama, fue distinguida por la Secretaría Regional del Medio Ambiente con su certificación nivel medio, en un acto que se realizó en dependencias del plantel educativo.
Esta ceremonia de entrega de la bandera y certificado, símbolos de la certificación ambiental, contó con la participación de la profesora encargada del establecimiento educacional, Margarita Jaque; profesionales del Área de Educación Ambiental de la Seremi del Medio Ambiente de Antofagasta; representantes de Minera “El Abra”, entidad que apoya el trabajo de este plantel educacional; dirigentes de la comunidad de Lasana, padres, apoderados, estudiantes e invitados especiales.
La Escuela G-23 se destaca por la participación de la familia en el proceso educativo ambiental; así como por el trabajo que realiza en la asignatura “Educación de Tradiciones”, inserto en el curriculum, donde los alumnos conocen y son partícipes de las costumbres y tradiciones de su pueblo.
Para la profesora Margarita Jaque, el reconocimiento de la certificación ambiental “es la suma final del esfuerzo de los alumnos y de los apoderados. Poder trabajar en la temática medioambiental les permite a ellos incentivarse para cuidar el entorno de su propia cultura”.
Este plantel tiene una matrícula de tan sólo 6 alumnos, la mayoría descendientes de la cultura atacameña y quechua, quienes han trabajado en la elaboración de un huerto en espiral de hierbas, jardineras confeccionadas de material reutilizado para el cultivo de hortalizas y una granja educativa.
Actualmente participan en la campaña “Yo Reciclo en Mi Colegio” de la empresa RECICLO y que patrocina el Ministerio del Medio Ambiente. Los residuos con potencial de recuperación que recolectan corresponden a plástico pet, tapas plásticas, papel blanco y latas de aluminio.
La encargada de Educación Ambiental de la Seremi, Silvana Campos, destacó que “el trabajo desarrollado en la Escuela Pukará de Lasana se ha realizado a través de la “Estrategia de Educación Ambiental Integrada para la Sustentabilidad”, que busca la asociatividad de la comunidad educativa, el medio inmediato de influencia y la participación activa de entidades privadas. En el caso específico de este plantel el apoyo ha sido brindado por Minera El Abra. Estas alianzas permiten en el corto plazo lograr la certificación ambiental de planteles educativos, para luego dar paso a programas de gestión ambiental sustentable”, puntualizó.