Daniela Manuschevich es bióloga de la Universidad Católica y desde pequeña nunca tuvo dudas que iba a estudiar biología. Su interés eran las plantas y los ecosistemas terrestres. Para Daniela, ser parte del MMA es un desafío muy lindo que lo toma con mucha responsabilidad. La nueva jefa de la División de Recursos Naturales y Biodiversidad nos cuenta sobre su llegada al ministerio, sus pasiones y su lado verde.
¿Cuáles fueron tus primeros acercamientos a los temas ambientales?
Desde chica que el medio ambiente para mí no era ir de paseo a visitar un parque nacional, sino que era todo lo que estaba al alcance de mi mano en el patio, como los insectos, las plantas, caracoles, cosas que veías todos los días. Entonces esa fascinación por entender por qué algunos insectos caminan hacia abajo (geotropismo positivo) y otros hacia arriba (geotropismo negativo) o porque las plantas que hacen lo que hacen. Todo esto me llenó el alma desde pequeña. Simplemente de observar el mundo te nace una curiosidad de tratar de entenderlo.
¿Qué es lo que más te apasiona de tu carrera universitaria o el mundo científico?
De biología lo que más me llama la atención es la fascinación por lo que realmente significa la biodiversidad y lo poco que sabemos de ella. Tendemos a empatizar por el pajarito, los mamíferos que se ven tiernos, pero esa es una parte tan pequeña de lo que es la biodiversidad y lo fascinante que son los procesos evolutivos, o como funcionamos nosotros mismos. Los seres humanos somos un sistema complejo que tiene una cantidad de señales que ocurren cada segundo y que no nos damos cuenta. Es un sistema súper complejo y que a la vez funciona tan bien y entender todo esto es fascinante, a nivel de individuo, población, ecosistemas y la biosfera.
También el mismo planeta tierra es un sistema complejo que a pesar de todo funciona de manera increíble, tiene una cantidad de señales, de comunicaciones, de información que fluye constantemente. Comprender todos esto es inagotable. Pasa lo mismo con la biodiversidad, sabemos tan poco de ella, no sabemos mucho de microorganismos, apenas podemos secuenciar su material genético o tratar de entenderlos.
¿Cuál es tu lado verde? (qué haces en el día a día para aportar al cuidado del medio ambiente)
Hago lo que puedo. Reciclo, ando en bicicleta, estoy tratando de regenerar plantas nativas, hábitos de consumo, ropa lo más reciclada posible, todo lo que pueda hacer lo hago. Me pone muy feliz intentar llevar una vida sustentable.
Tienes algún hobby?
Me gusta y necesito hacer yoga, dependiendo del momento puede ser en la mañana, en la tarde o en la noche. También me gusta cocinar, leer y bailar. Me gusta bastante bailar salsa y en general todo menos reggaetón.
¿Qué documental y/o libro recomiendas y por qué?
Recomiendo el libro “The invention of nature: Alexander von Humboldt”, escrito por Andrea Wulf. Este excelente libro relata la vida Humboldt, naturalista alemán, considerado el padre de la biogeografía, quien creó una nueva forma de entender la naturaleza. Es un increíble viaje de exploración y conocimiento que recomiendo a todo el mundo.
Del sector donde está nuestro ministerio, ¿qué lugar recomiendas para almorzar?
Recomendar todavía no. He podido salir bastante poco a almorzar.
¿Qué prioridades tendrá la División de Recursos Naturales y Biodiversidad los próximos años?
Una de las prioridades es el Servicio de Áreas Protegidas y Biodiversidad (SBAP). Y, luego, el interés está en dar una mirada más completa a cómo entendemos la biodiversidad. La biodiversidad no es solo mamíferos o plantas, sino que es mucho más que eso y no está solamente en parques o reservas naturales. Si lo conservamos solo en parques naturales o áreas protegidas por ningún motivo será suficiente. Como mínimo hay que protegerlos en estos lugares, pero tenemos que empezar a generar instrumentos para poder cuidarlos en todas partes. Estos instrumentos van desde lo económico a lo material con cosas prácticas que uno puede empezar hacer. Por ejemplo, sacar la presión que tenemos sobre la naturaleza para que empiece a través de sus propios mecanismos naturales a regenerarse, hasta asuntos más culturales y quizás poco estudiadas de la biodiversidad que tiene que ver con la memoria y la historia, es también un patrimonio.
Quien tenga un pariente en el sur puede reconocer que a veces hablan de especies que conocían cuando eran más jóvenes, que vieron cuando niños y que traían recuerdos emocionales, pero que hoy son muy difíciles d encontrar o ya no existen. Esto trae un recuerdo emocional, sería necesario y muy importante ampliar la mirada de la biodiversidad, en todos los campos, políticos, culturales, económicos.
¿Qué significa para ti haber llegado al Ministerio del Medio Ambiente?
Es un desafío que tomo muy contenta y que creo que puedo realizar de manera efectiva. Como se gestó fue un poco rápido, ya que antes de llegar al MMA estaba en la academia, en el Departamento de Geografía de la Universidad de Chile y ha sido bastante intenso. Todavía siento que estamos en un proceso de entender todo, porque es un ministerio muy trabajador donde se hacen muchas cosas en paralelo entonces estoy como en el proceso de entender el servicio público y es, en general, un cambio de vida grande, pasar desde la academia a liderar la División de Recursos Naturales del MMA.