El daño ambiental que producen los Envases y Embalajes de plástico (EyE) depende de su composición y ciclo de vida, por lo que para el éxito de la Ley de Reciclaje es clave su diferenciación y clasificación.
Esta es una de las principales conclusiones del estudio elaborado por la Dirección de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la Pontificia Universidad Católica de Chile (Dictuc) en conjunto con TriCiclos, y que fue presentado en el Seminario “Ecodiseño @The New Plastics Economy”, donde participó el subsecretario de Medio Ambiente, Jorge Canals, junto al Director Ejecutivo de ASIPLA, Nicolás Bär, y el experto internacional en el New Plastics Economy, Michiel De Smet.
Cada uno de los representantes, desde sus ámbitos, expuso sobre la importancia de adoptar nuevas tecnologías y medidas que contribuyan a una mejora constante en el reciclaje de los plásticos y, por ende, en un mejor cuidado del medio ambiente.
“Minimizar de forma preventiva el impacto de productos y servicios en todo el ciclo de vida es lo que nos hemos propuesto a través del ecodiseño. Lo que antes eran ineficiencias en el proceso, hoy son oportunidades de ahorro y de mejoras no solo para la calidad de un producto, sino también para un consumo más sustentable, a esto apuntamos con la ley”, señaló el subsecretario Canals.
La jornada contó también con un panel de expertos, moderado por Gonzalo Muñoz, CEO de TriCiclos, en el cual se discutió sobre los principales alcances del Ecodiseño en las diferentes etapas de la cadena productiva.
Al respecto, Nicolás Bär comentó que “los plásticos en el futuro tienen que ser más eficientes medioambientalmente. La Ley de Reciclaje presenta un marco regulatorio adecuado y su correcta implementación será clave, así como también la incorporación de productos que no han sido aún considerados, como las bolsas plásticas. A través de la ley se debieran generar los incentivos para su reducción y manejo adecuado”.
Principales conclusiones del estudio
Los investigadores concluyeron que privilegiando el establecimiento de metas individuales de reciclaje por categoría de plástico, versus la fórmula de fijar una meta global de reciclaje para estos envases, se reduciría considerablemente el impacto medioambiental. Se establecería también la real responsabilidad del productor, se medirían mejor sus costos y se diferenciarían los efectos en el mercado y en el consumidor.
Los resultados del estudio muestran que considerar la implementación de una meta individual para cada categoría de plástico permitiría disminuir en un 76% las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), debido a que un escenario de estas características, incentiva el desarrollo del ecodiseño y el respectivo reemplazo de ciertas categorías de plástico que generan un alto impacto ambiental, en toda la cadena de producción del empaque.
El Ecodiseño es una versión ampliada y mejorada de las técnicas para el desarrollo de productos que conduce hacia una producción sostenible y un consumo más racional de recursos.
Gonzalo Muñoz, fundador de TriCiclos, señala que “el ecodiseño es una herramienta fundamental para avanzar hacia una economía eircular, en la cual el foco debe estar más allá de gestionar apropiadamente los residuos generados por nuestro hábitos de consumo, sino más bien en tratar de evitar la generación de éstos, dejando así de desperdiciar recursos naturales, contaminar nuestros océanos y alimentar rellenos sanitarios”.