El ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier, lanzó programa de recuperación y reciclaje electrónico de Ericsson desarrollado en Chile con la empresa Entel, el cual busca disminuir los efectos de este residuo en el medio ambiente y que se encuentra normado por la recientemente aprobada Ley de Fomento al Reciclaje.
En la actividad, realizada en el mirador de la Torre Entel, en la cual participó Antonio Büchi, Gerente General de Entel Chile y Nicolás Brancoli, vicepresidente de Ericsson para América Latina, la autoridad ambiental destacó la iniciativa, pues “son empresas inteligentes que logran ver en el reciclaje una oportunidad y no un problema”.
La autoridad ambiental agregó que “este programa de reciclaje electrónico es un ejemplo de lo que busca Ley de Fomento al Reciclaje recién aprobada y próxima a ser promulgada. Esta iniciativa busca, entre otras cosas, formalizar la industria del reciclaje en Chile y hacer que las empresas se hagan cargo de sus productos hasta el final de su vida útil. Los aparatos electrónicos y sus productos asociados generan un volumen importante de residuos de rápida caducidad producto del avance de la tecnología. Así, una decisión inteligente es reciclarlos y darles un destino donde se utilicen como nueva materia prima. De esto se trata el desarrollo sustentable y lo que buscamos como Gobierno”.
Por su parte, Antonio Büchi, gerente general de Entel Chile afirmó que “actualmente en Chile estamos viviendo un importante cambio en el tratamiento de los residuos generados por las empresas. La próxima promulgación de la nueva Ley de Fomento al Reciclaje planteará un gran desafío para todas las compañías y esta alianza con Ericsson es un paso adelante en este sentido”.
En tanto Nicolás Bráncoli, vicepresidente de Ericsson para América Latina agregó que “este programa refleja el compromiso de la compañía con los temas de la sustentabilidad y responsabilidad corporativa en la región, haciéndonos responsables de los probables impactos en el medio ambiente de nuestros productos durante su ciclo de vida”.
El programa contempla la recuperación no solo de equipos telefónicos, sino que también toda la gama de artefactos electrónicos asociados a la operación y transmisión de telecomunicaciones, tales como antenas, cajas de red, módems, entre otros elementos, mediante la recuperación, el desmantelamiento, el transporte, el almacenamiento y la eliminación de tecnología obsoleta.
Cómo funciona el programa
El programa contempla que los equipamientos, clasificados como desecho, sean retirados de las bodegas de Entel y después transportados por mar hacia un socio de reciclaje aprobado por Ericsson ubicado en Europa. Allí, comenzará el proceso de clasificación y desmantelamiento, y luego se enviará los equipamientos a las principales instalaciones de reciclaje, donde termina el proceso.
El desarrollo de este programa genera importantes beneficios para el medio ambiente, ya que mediante la minería secundaría, es decir, la extracción de metales desde aparatos eléctricos, permite conservar y cuidar de mejor forma los recursos naturales no renovables. Asimismo, reutilizando los equipos, se evita que lleguen a contaminar los suelos y aguas por su desuso.
Además su correcta reutilización genera importantes beneficios a la salud, ya que los residuos generados a partir los aparatos tecnológicos contienen metales pesados como el plomo y mercurio, que pueden causar daños a la salud humana afectando el sistema nervioso central, respiratorio y renal.
Según cifras de las Naciones Unidas, cada chileno produce al año 9,9 kilos de basura electrónica, casi el doble del promedio mundial.