Sumar a la valiosa experiencia que tienen los guardaparques del Sistema Nacional de las Áreas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE) en la protección de la biodiversidad, un mayor conocimiento en gestión para la conservación, fue el principal objetivo de un curso de formación, iniciativa del proyecto GEF-SNAP del Ministerio del Medio Ambiente y la Corporación Nacional Forestal (Conaf).
Alejandra Figueroa, directora Nacional del Proyecto GEF SNAP y jefa de la División de Recursos Naturales y Biodiversidad del Ministerio del Medio Ambiente, concurrió a saludar a los 30 guardaparques participantes del Curso de Formación de Guardaparques Instructores, que se está realizando en el Centro de Información Ambiental en la Reserva Nacional Río Clarillo.
“Estamos cerrando una etapa del proyecto GEF que incluyó importantes capacitaciones en torno a los nuevos desafíos de la gestión de áreas protegidas con Conaf. Estas están orientadas a profundizar en materias socioculturales relacionadas con la conservación, elementos de ecología y de gestión para la conservación. Es decir, elementos fundamentales para manejar sustentablemente un área protegida”, señaló Alejandra Figueroa.
Los guardaparques, agrega la profesional, tienen una experiencia y una preparación que necesitamos sumar a aquellas áreas que hoy no tienen administración como santuarios, parques y áreas marinas costeras, entre otros. “Hay que sumar expertiz a aquellas otras áreas que abarcará el futuro Servicio Nacional de Áreas Protegidas y Biodiversidad”, aseguró la jefa de área.
El propósito de este esfuerzo conjunto es contribuir en la capacitación del personal clave que conformará el futuro SNAP, donde los guardaparques que actualmente gestiona CONAF, son un grupo prioritario por su importancia cuantitativa y cualitativa. Tanto el curso de guardaparques instructores como de ejecutores, está siendo impartido por académicos expertos en patrimonio silvestre de la Universidad de Chile