Seremi del Medio Ambiente llama a la ciudadanía a ser responsable al momento de desechar sus mascarillas.
La pandemia del covid-19 obligó a utilizar elementos de protecciones plásticos como las mascarillas las que, una vez utilizadas, se convierten en residuos, y su mala gestión ha provocado serios problemas ambientales. Las mascarillas están confeccionados de diminutas fibras de polipropileno, un material que prácticamente no se degrada, por lo tanto, se pueden acumular en medios marinos y terrestres, y ocasionar daños a animales, seres humanos y a los ambientes naturales.
En esa línea, el Seremi del Medio Ambiente, Guillermo Ready explicó que “el coronavirus, además de la crisis sanitaria, también nos trajo la «basura Covid» como son las mascarillas plásticas, los guantes o los escudos faciales y, lamentablemente, muchas de ellas están contaminando nuestras playas, parques o calles”.
El Seremi Ready afirmó además que “el Covid-19 sigue presente en el país, por eso es muy importante que nos sigamos cuidando y usemos siempre la mascarilla. Por eso, y dado el aumento en la movilidad al estar la mayoría de los chilenos en fase 3 y 4, debemos ser más responsable en el manejo de las mascarillas luego de usarlas”.
“Lamentablemente todos hemos podido evidenciar, solo al caminar por nuestras calles, visitar playas o parques, la presencia de mascarillas tiradas u otros elementos de protección personal, lo que genera un daño al medio ambiente”, expresó la autoridad ambiental.
La recomendación para la ciudadanía es que las mascarillas o guantes que sean desechables, deben ser puestos en una bolsa de basura especial para esto, bien cerrada. En caso de provenir de una casa donde existan casos positivos de Covid-19 o indicios de que así fuera, utilizar doble bolsa para botar estos elementos, dejándolos para la recolección de basura y no el reciclaje”.
Si estimamos que los chilenos usan 2 mascarillas desechables al día, totalizaríamos más de 30 millones cada 24 horas. Considerando el peso de las mascarillas, en un mes desecharían más de 4.000 toneladas de plástico adicionales, equivalente en peso a 27 ballenas azules, las que no pueden terminar en nuestros suelos, sino que llegar a los rellenos sanitarios donde se manejen de forma adecuada.
Por eso, la recomendación a la ciudadanía es que pongamos las mascarillas dentro de bolsas plásticas reutilizadas de alimentos como fideos, arroz, azúcar, y luego cerrarla bien antes de depositar en el basurero.