Día de la diversidad biológica: Conociendo y conservando al queule en la región

En el marco del día mundial de la biodiversidad, celebrado cada 22 de mayo, es crucial destacar la importancia que tiene la conservación de las múltiples formas de vida que habitan nuestro planeta, lo que va desde plantas, animales, microorganismos y ecosistemas.  

Es así como en esta fecha, mediante diversas actividades a lo largo del mundo se busca poner en valor lo fundamental que resulta la diversidad biológica en el funcionamiento de los ecosistemas y por consiguiente, el bienestar de la humanidad, debido a los servicios ecosistémicos que nos entregan, los que van desde la regulación del clima, la purificación del agua, la producción de alimentos, hasta la adaptación a los efectos del cambio climático.  

Es por ello, que en un esfuerzo por concientizar a la ciudadanía y proteger la biodiversidad de nuestro país, es que el Ministerio de Medio Ambiente en coordinación con Fundación El Árbol, desde comienzos de 2023 se encuentran ejecutando el proyecto de “Comunicación y educación ambiental para la conservación del queule”.  

La iniciativa retoma el trabajo realizado hasta 2022 desde la cartera de Gobierno junto a la FAO en el Proyecto de Conservación de Especies Amenazadas (GEF) donde desarrollaron diversas acciones para la gestión, conservación y protección del Queule, (Gomortega keule), árbol endémico de Chile que existe desde hace unos 100 millones de años, por lo que se le considera un fósil viviente y el cual solo posible encontrar en zonas costeras de Maule, Ñuble y Biobío. 

 Sin embargo, esta especie pese a contar con la declaración de Monumento Natural desde 1995, en la actualidad figura en la lista de especies En Peligro de Extinción. De esta manera el proyecto de “Comunicación y educación ambiental para la conservación del queule” nace para continuar trabajando por sensibilizar e involucrar activamente a la ciudadanía en el cuidado y la conservación de los relictos de queule.  

En palabras del seremi del Medio Ambiente de Ñuble, Mario Rivas, “el bosque que constituye el hábitat de queule provee importantes servicios ecosistémicos de provisión, regulación y mantención, pero también culturales. En este punto es clave la educación ambiental, con el fin de que la especie pueda ser reconocida por toda la comunidad y visitantes, profundizando en las medidas para su conservación”.    

En el caso de la región de Ñuble, la autoridad de Medio Ambiente señala que “se han identificado poblaciones de esta especie en las comunas de Cobquecura, Trehuaco y Coelemu. Dentro de este marco, estamos iniciando el Plan RECOGE del Queule (Recuperación, Conservación y Gestión), lo cual permite la coordinación entre servicios públicos, ONGs y la comunidad, para ejecutar medidas como voluntariados para el control de especies exóticas, que ya se están planificando”.  

En Cobquecura destaca el fundo El Quile, el cual posee una población numerosa y en buen estado de conservación de individuos de queule en parches de bosque nativo maulino de aproximadamente 40 hectáreas.  

Este sitio además es uno de los pocos en el  país donde se ha registrado la germinación de las semillas de este árbol, lo cual resulta vital para la subsistencia de la especie y además alberga el queule de mayor tamaño registrado hasta ahora y el cual podría ser considerado el árbol madre, ya que se estima poseería unos 500 años de antigüedad, siendo protegido por varias generaciones de la familia de Patricio Varas, propietario Fundo Quile.  

De esta manera, a lo largo del desarrollo del programa de “Comunicación y educación ambiental para la conservación del queule”, se han llevado a cabo diversas actividades en la zona, gratuitas y abiertas a la comunidad, como salidas ambientales para recorrer el sendero Hualhual en el fundo Quile, guiadas por monitores ambientales y las que contemplan visitas a hitos de interés respecto de este árbol y el bosque nativo que lo acompaña, además de ser una instancia para dialogar sobre medidas de protección de naturaleza y aplicar metodologías de aprendizaje experiencial y participativo.  

Asimismo este proyecto ha desarrollado diversos talleres y jornadas de buenas prácticas, donde ha participado la comunidad en general y también establecimientos educacionales, para dar a conocer las características que nos permiten identificar el queule, su hábitat, los usos tradicionales, además de sensibilizar acerca de las amenazas que hoy tienen a esta especie en Peligro de Extinción, idear soluciones desde la ciudadanía para su conservación y además dar a conocer los esfuerzos que se están realizando desde el Ministerio de Medio Ambiente, a través de sus bajadas regionales para proteger la biodiversidad de los territorios.

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Publicado en Región de Ñuble.