“Hoy nos reunimos para iniciar un inédito proceso colaborativo para proteger las fuentes de agua, la biodiversidad y los valores productivos y culturales de Nahuelbuta». Con esas palabras el seremi del Medio Ambiente de la Región del Biobío, Richard Vargas, reflejó la importancia del Primer Encuentro Bi-Regional por la Conservación de la Biodiversidad de los Ecosistemas de la Cordillera de Nahuelbuta.
La iniciativa de definición de acciones concretas en el territorio cuenta con la activa participación del Comité Iniciativa Nahuelbuta y del Diálogo Forestal Chile y la presencia de los seremis del Medio Ambiente de las Regiones del Biobío y Araucanía, además de los alcaldes de las comunas de Contulmo y Purén,
«Iniciar la construcción de una agenda y plan de acción conjunta resulta fundamental, pues la naturaleza no reconoce fronteras; esto es algo que desde hace rato venimos experimentando con el cambio climático y el creciente deterioro de servicios ecosistémicos. Sin duda es un hecho que marca una diferencia positiva en materia de gestión ambiental al involucrar además a todos los actores locales en el concepto de “Nahuelbuta: dos regiones, un solo territorio”, destacó Richard Vargas.
Por su parte, Marco Pichunman Cortés, seremi del Medio Ambiente Región de La Araucanía resaltó el encuentro de ambas regiones bajo un solo territorio, como una oportunidad para poner en valor la Cordillera de Nahuelbuta.
“Se pone énfasis en un trabajo público-privado que no apunte a conservar por conservar, sino más bien a gestionar este territorio, potenciando sus servicios ecosistémicos en beneficio de las comunidades locales. Entre las líneas a desarrollar con este trabajo colaborativo está el turismo de intereses especiales, vinculado a relevar el patrimonio natural y cultural de esta zona”, explicó la autoridad medioambiental.
El Alcalde de Contulmo, Diego Ibáñez Burgos, que ejerció de anfitrión del encuentro, comentó que «los alcaldes debemos aportar con los profesionales y con las oficinas de medio ambiente, pero necesitamos del trabajo de nuestras autoridades regionales y de nuestros parlamentarios para disponer de herramientas de gestión y leyes que nos permitan proteger efectivamente nuestro entorno”.
Asimismo, Jorge Rivera Leal, alcalde Municipalidad Purén, señaló que “participaremos activamente en la consecución de los objetivos que se han planteado hoy, que son muy potentes. Este esfuerzo se hace más fuerte mientras trabajemos de manera macomunada con las políticas del Gobierno de Chile que pretenden romper estas fronteras para realizar un trabajo más efectivo”.
PLAN DE ACCIÓN
Bernardo Reyes, Coordinador Comité Iniciativa Nahuelbuta, comentó que “la agenda y plan de acción a desarrollar incluye Proteger y evaluar la ampliación de las áreas silvestres protegidas del Estado y sus áreas de amortiguación para crear una Reserva de Biosfera Nahuelbuta».
El objetivo -explicó Reyes- es que el territorio se consolide como bioproductivo para la sustentabilidad, trabajar en la prevención y alerta temprana de incendios; ampliar la superficie del Parque Nacional y del Monumento Natural Nahuelbuta, y desarrollar e implementar un plan conjunto de educación ambiental para fortalecer una ciudadanía ambiental empoderada y activa en la protección del patrimonio natural.
La Cordillera de Nahuelbuta es una zona de transición climática y biogeográfica, en que se sobreponen dos tipos de vegetación: los bosques de hoja caduca y matorrales de la zona mediterránea y los bosques siempreverdes valdivianos. Esta condición de transición, sumado a la variedad climática y de ecosistemas, ha favorecido el desarrollo de una alta biodiversidad, motivo por lo cual es reconocida a nivel internacional como uno de los “hotspots” de mayor riqueza de especies a nivel mundial y, en particular, por su alto nivel de endemismo.
Son al menos las comunas de Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Tirúa y Contulmo de la Provincia de Arauco, Región del Biobío; junto con Purén, Angol, Los Sauces de la Provincia de Malleco, Región de La Araucanía, las poblaciones que son abastecidas de agua que generan las cuencas altas de la Cordillera de Nahuelbuta, los mismos sectores que funcionan como corredores biológicos de fauna silvestre actualmente en condiciones de vulnerabilidad y peligro.