Mientras gran parte de Chile se prepara para recibir el 2016 con fuegos artificiales,la Municipalidad de Cobquecura decidió cancelar su espectáculo pirotécnico que tenían programado para el año nuevo y prohibir todo producto similar para proteger a los lobos marinos del sector.
La Seremi del Medio Ambiente había enviado un oficio en que explica que los estruendos generados por los fuegos artificiales generan estrés en los más de 2.700 ejemplares de lobos marinos que habitan en las zonas rocosas de la comuna, sobre todo en hembras preñadas, además de una gran cantidad de mascotas.
De acuerdo a especialistas de la Universidad de Chile, el biólogo Agustín Iriarte, quien también es director de la consultora ambiental de Flora y Fauna de Chile señala que “en las loberías de Cobquecura, las pariciones ocurren entre los meses de enero y febrero, aunque también se dan entre septiembre y marzo”, como lo explicó al diario Las Últimas Noticias como advertencia ante la exposición sonora de elementos pirotécnicos.
Y como otra consecuencia, el especialista afirma que el estruendo implica un riesgo mayor para las futuras crías, porque comúnmente las lobas se lanzan al mar para refugiarse, pero abandonan a sus crías para protegerse. “Los cachorros, en tanto, por la falta de experiencia en el nado no son capaces de romper las olas”, advirtió Iriarte acerca del riesgo que constituye el ruido de año nuevo. “Las marejadas los arrastrarían hasta la costa desde donde no podrían regresar por su cuenta al roquerío”, indicó.
Publicado en ADN Radio
Fotografía: Rodrigo Pacheco